El alcalde de Algarrobo autoriza mediante un bando al Ratoncito Pérez a seguir visitando a los niños del pueblo

La orden municipal también nombra a los más pequeños miembros del «Cuerpo Especial de Lucha contra el Coronavirus del Ayuntamiento»
El Ratoncito Pérez podrá acudir por las noches a las casas de los niños de Algarrobo a los que se les haya caído algún diente durante el confinamiento pero deberá hacerlo con la debida protección: mascarillas y guantes y lavándose las manos de manera frecuente.
El alcalde, Alberto Pérez, en un bando, autoriza estas visitas al tiempo que felicita a los más pequeños del municipio «por su comportamiento ejemplar y admirable en estos momentos tan difíciles».
Así, ha destacado el esfuerzo de no salir a las calles, de realizar las tareas escolares y la ayuda que están prestando en la localidad al quedarse en sus casas. Por ello, todos los niños y niñas de Algarrobo han pasado a formar parte del denominado Cuerpo Especial de Lucha contra el Coronavirus del Ayuntamiento.
Entre las medidas a realizar está el ayudar y servir de apoyo, dentro de las limitaciones del confinamiento, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en las tareas de concienciación y lucha contra el virus.
De hecho, deben concienciar y recordar a los padres y madres la necesidad de respetar las medidas de confinamiento domiciliario y evitar salir de casa sin causa justificada; además de estar al tanto de que se pongan en práctica las medidas de higiene y prevención básicas para garantizar la seguridad del hogar.
En el bando se pide a los más pequeños que contacten todos los días con sus abuelos mediante llamadas telefónicas, videollamadas o redes sociales usando, en ellas, la etiqueta #abuelémonos propuesto por la Asociación Española de Pediatría (AEP) para «mostrarles todo el cariño como medicina contra la soledad». «Es momento de devolver a los abuelos todo lo que han hecho por nosotros», sostiene el documento.
También se les pide a los más pequeños que usen y fomenten la imaginación mediante el dibujo, la lectura y el juego como herramienta para actividades familiares «de manera que este tiempo sea lo más ameno y divertido posible para todos».