Las ausencias en la feria de la tapa de Rincón de la Victoria, obviadas en los discursos de inauguración

Tanto Ayuntamiento como la asociación de comerciantes centran sus intervenciones en agradecer el esfuerzo de los presentes
La alcaldesa de Rincón de la Victoria, Encarnación Anaya, el presidente de la Asociación de Comeciantes de la localidad, José Antonio Villodres, y el presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Axarquía, Gregorio Campos, han inaugurado la XVIII Feria de la Tapa, que se celebrará en una carpa situada junto a la oficina de Turismo hasta el próximo 5 de junio.
En esta edición sólo participan diez establecimientos para mostrar la conocida gastronomía rinconera, entre ellos una hamburguesería y una pizzería.
En concreto, se trata de La alegría de la Cala, Hamburguesería Mari Pepa, El Rincón de la Pizza, La Mar de Bueno, Rincón de Emilio, Restaurante Los Morenos, Maryfran, Nuevo Varadero, El Rejoneo y El Fogón de la Abuela.
A pesar de ello, las ausencias en la feria fueron obviadas en los discursos de inaguración y tanto Ayuntamiento como la asociación de comerciantes centraron sus intervenciones en agradecer el esfuerzo de los presentes.
La cita, que se celebra en horario de 12,00 a 17,00 horas y de 20,00 a 01,00 horas, abre la agenda de verano del municipio ofreciendo como mínimo 6 tapas distintas por establecimiento al precio de 2,5 euros en los que se incluyen bebida más tapa, ofreciendo la posibilidad de canjear dos tapas o dos bebidas por consumición.
Entre las tapas que se podrán degustar durante los cuatro días se encuentran los platos tradicionales de la gastronomía local y malagueña como el lomo al vino de Moclinejo, callos, paella o carne mechá, entre otros.
El presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Axarquía, Gregorio Campos, ha mostrado su satisfacción “por hacernos partícipes de este importante evento turístico-gastronómico, que además viene a generar empleo y activar la economía local”.
En colaboración con Bodegas Dimobe, patrocinador de la Feria de la Tapa de Rincón de la Victoria, se distribuirá una Guía de Maridaje, en la que los visitantes podrán conocer cuál es el vino que mejor marida con las tapas participantes en el concurso.
Por otro lado, la feria también premiará al mejor stand, tarea para la que se empleará la técnica del “cliente misterioso”. Se trata de una modalidad de concurso en la que un grupo de personas, sin comunicar al stand su calidad de jurado, se encargará de valorar aspectos como la decoración, el trato al cliente, la rapidez en el servicio y la presentación de las tapas, entre otros.
La Feria contará este año con una programación que acoge el tradicional concurso, actuaciones musicales todos los días con grupos locales de música y baile, y por primera vez con los conciertos musicales del grupo flamenco-pop, Sonique, y de pop-rock Money Makers.
Además, a través de la app ‘PlayItApp’, los visitantes podrán elegir las canciones que sonarán en la carpa. Todos los que deseen participar en esta iniciativa deberán conectarse a la red wifi de la feria y tener descargada la app ‘Play It Up’ en su móvil.
A partir de ese momento, sólo tendrán que buscar su canción favorita y agregarla a la lista de reproducción, de tal manera que sonará por los altavoces de la carpa a los pocos minutos.
Algunos Comercios de Rincón de la Victoria han mostrado a AxarquiaPlus su preferencia más por un evento tipo ruta de la tapa, como hace la mayoría de los municipios de Málaga, en el que es el público el que se desplaza de un comercio a otro y así son mejores atendidos y pueden degustar los platos con todas las garantías, al mismo tiempo que el esfuerzo económico ya no resulta tan excesivo.
"Una cosa era antes cuando la cosa iba bien, pero ahora que vamos muy apretados para poder pagar los gastos habituales, no podemos hacer frente a gastos extraordinarios, y en ese sentido la feria tenía que haberse adaptado, ya que de lo contrario no es reflejo exacto de la famosa gastronomía de Rincón", afirma una de las empresarias de hostelería del municipio.
Sobre la dificultad de los empresarios rinconeros a poder atender de manera simultánea sus negocios habituales y un puesto en la carpa, Villodres señaló que "claro que le es difícil. Como a mí. Es como una odisea, un sobreesfuerzo y mientras mejor situado estoy y más dinero gano, ya no tengo ganas de ir de feria en feria. Eso me pasa a mi también, que ya no voy a tantas porque gano mucho dinero".
Villodres también aludió a problemas entre socios o de falta de experiencia en las nuevas generaciones que gestionan establecimientos de renombre y dijo no importarle las críticas porque "alguien puede que no esté satisfecho, pero cuando la gente de la carpa y de los alrededores vea el viaje de billetes que le va a entrar en estos días, pues que le vamos a hacer, no se puede contentar a todo el mundo".
El presidente del colectivo organizador dijo que, a pesar de todo, esta satisfecho porque "hay entidades de mucho calado en cuanto a tapeo y representativa de la gastromomía local, como todos los años. Gente que no falla año tras año".
El representante del colectivo aseguró que "tampoco hemos querido movernos más para que los que ya están en la carpa puedan ganar más dinero".
Según los datos facilitados por Villodres, la feria supondrá una facturación de 300.000 euros de ventas directa, un 50% entre los que están en la carpa y el resto entre los bares de alrededor y establecimientos de todo tipo como heladerías y cafeterías. "Hay que tener en cuenta que te tomas dos o tres tapas en la carpa y luego te vas a comer a los bares de alrededor porque allí hay tanta gente que no puedes atenderlas", señaló.
"Esto supone 12.000 euros de caja por establecimiento de media, lo que limpios después de pagar gastos y empleados, puede ser que te lleves 3.000 euros para tu casa de media. Pero también te puedes ir con una pérdida de 3.000 euros, como se han ido algunos, porque lo hacen mal, despachan tarde, despachan con antipatía, despachan con dejadez, despachan con poca calidad, tiene poca aceptación tu nombre… y eso les cuesta el dinero y eso es lo que cada empresario debe mirar muy detenidamente. La feria de la tapa es una cosa muy seria. Esto no es un a pachanga como los primeros años", sentenció.
En cuanto a los gastos, Villodres los cifró en 35.000 euros, siendo la carpa con algo más de 20.000 euros, la que se lleva la mayor parte. No obstante, este gasto, junto con la luz y algunas actuaciones más destacadas, es asumido por el Ayuntamiento. El resto de la inversión lo aporta la propia asociación (unos 6.000 euros) y cada uno de los establecimientos que se instalan en la carpa y que abonan unos 900 euros.